- Buenasssssss
- Hola, Santi, madrugaste!
- No tenía más sueño.
- ¿ Te preparó el desayuno?
- Dale...
Al rato se escucha:
- Holaaaaa...Hey ... ¿ Qué hacés acá chino?
- A mí me invitaron ayer, a vos no pibita...
- ¿ Y? Yo vengo igual ¿no abu?
- Cierto, a tu primo lo invitó Tata anoche - aunque me lo dejó a mi de clavo porque el tipo se fue a trabajar y a mí me quedó el paquete...
- Ja, ahora tenés dos paquetes...
Colorin colorado, los primos felices y yo también.
Ideas,opiniones y ocurrencias de una mujer común y bastante veterana que una vez, allá lejos - y hace mucho tiempo - fue una nena y que por suerte la sigue llevando adentro para poder ponerse a la par de tantos nietos y poder estar, jugar o simplemente escucharlos...eso, nada más...porque como dijo Gandhi " Los mejores profesores, los niños", y yo quiero seguir aprendiendo...
2 comentarios:
No hay como la casa de la abuela, recuerdo sus olores, sus manos tibias y me emociono.
Majito
tal cual, majito.
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