En el lugar menos pensado...

Se ríen de mi, hacen chistes todo el tiempo porque dicen que soy muy charlatana, hasta yo misma me río porque digo que si en una cola de gente nadie me habla le charlo a una columna pero ahora resulta que parece que algunas de mis charlas con el pueblo dan resultado, paso a contarles. Hace unos años, adentro del agua en una playa de Estados Unidos me puse a hablar con una señora argentina y - yo ni me acuerdo - parece que le hice el comentario de nuestro trabajo solidario, este año,ya hacen unos meses,  ella me vuelve a ver en la playa , se acercó y charlamos pero poco, después de unos días esta señora y su esposo vinieron a despedirse porque se volvían a Bs Aires y ya casi a unos metros de distancia el señor se da vuelta y me dice:

- Ustedes siguen con el tema de los chicos desnutridos? 

- Sí, claro, ya hace mucho tiempo que nos dedicamos a full, tenemos muchas familias en el Centro.

- Bueno, a mi me interesa mucho ayudar a ese Doctor porque cada vez que lo escucho me emociona su obra, les sirven telas?

- Claro, a nosotras nos sirve todo, para las ferias nos sirve hasta un ladrillo, para los talleres las telas nos sirven para que las madres aprendan a coser, todo trapito es bienvenido.

- Entonces, el señor me dijo, si tenes quien pase a retirar las bolsas por la Capital ya tengo más de treinta para ustedes, eso si, hace falta una camioneta y habrá que hacer varios viajes...y ya a lo lejos la esposa gritó que también nos iba a dar ropa de su hijo...

- Bueno, desde ya gracias, nos hablamos... y si bien me alegró el entusiasmo de ese señor, son tantas las veces que nos han prometido algo que luego se esfuma y queda siendo solo una promesa que ahí quedó la cosa.

Pasaron unos días y ya teníamos la ropa del hijo  en excelente estado y dos semanas después empezaron a llegar las bolsas y bolsas y bolsas y bolsas enormes de telas y desde ese día estamos midiendo y cortando para aprovechar toda esa maravilla. 

No solo regalamos, también estamos vendiendo, por no decir casi regalando los cortes mas grandes y estamos haciendo que las madres que ya saben coser le cosan a las otras, ahora todas tienen manteles, sabanas, manteles, manitas, cubrecamas, vestidos y seguimos recibiendo  bolsas y bolsas de telas...

Moraleja

No se rían de mi porque hablo hasta con las paredes como Shirley Valentine, a veces algo se consigue... entre charla y charla...