Un día distinto...

Día de feria.
Hay que recontra madrugar,  abrir valijas y valijas, acomodar  todo sobre tablones, llenar los percheros. No parar, esas horas vuelan, no alcanzan, hay que apurarse mucho.
Entregar los números y ver a tanta gente agolparse en la puerta para ser los primeros nos da fuerzas para seguir.
Chicasss...son las 11 y media, vengan rápido a comer un sandwichito porque a las doce largamos.
Todo listo, adelante gente, todo es de ustedes!
Pasó un rato, empiezan las grandes colas para pagar, hay matrimonios llenos de triciclos, mujeres con cacerolas y gigantes bolsas de ropa.
Se nubla, empieza el viento y algunas gotas de lluvia, las cajeras estamos siempre muy a la intenperie y teníamos mucho frío, miramos el cielo y dijimos ¡sonamos otra feria con lluvia! será posible...

De golpe sale el sol y se  escucha a alguien que dice : ¡Hay Papa! y saben que es argentino?
Pensé, que bobo con esas cosas no se juega, y seguí cobrando y cerrando las inmensas bolsas con los precintos.
Al poco tiempo veo que todo el mundo empieza a saltar y a abrazarse ...increible...ahora lo escribo y se me vuelve a poner piel de gallina ...todos se abrazaban, gente que ni se conocía: el pintor con el jardinero y la patrona finoli con el cartero y la voluntaria judía con la catequista...fue muy fuerte la tarde de hoy.
Estoy feliz!
Soy católica, pero no voy a misa, yo soy de las que van  a rezar a solas, cuando siento que la Iglesia es mía, pero hoy soy más papista que el Papa.
Felicitaciones al Cardenal Bergoglio, un hombre tan sencillo que ni nombre eligió: Francisco, ese sí  que fue un santo de verdad. Mi adorado San Francisco de Asís.

Un fue un día distinto, me voy a dormir con esperanzas...me voy a dormir feliz!